Asunción, Paraguay, julio 5, 2012.--Un recurso de inconstitucionalidad contra la destitución del presidente paraguayo, Fernando Lugo, se presentó hoy ante la Corte Suprema de Justicia, paso inicial para que sea debatido en tribunales internacionales.
Los abogados del destituido mandatario demandaron a los magistrados declarar la ilegalidad del juicio político llevado a cabo por el Congreso y la restitución inmediata de Lugo en su cargo.
Para ello, alegan las irregularidades del proceso, el cual negó las garantías mínimas establecidas para la defensa del jefe de Estado, sacado del poder en menos de 24 horas y con apenas dos horas para defenderse de cargos imputados sin prueba alguna.
De acuerdo con lo establecido en las atribuciones de la Corte, los magistrados podrán decidir entre devolver a Lugo a la Presidencia de la República, ordenar nuevo juicio político con todas las garantías o rechazar la inconstitucionalidad del procedimiento empleado por el Parlamento.
El criterio de que la Corte paraguaya decidirá por esta última alternativa es generalizado, pues los jueces, amenazados anteriormente de juicio político por cargos de corrupción y falta de idoneidad para desempeñar su labor, dieron públicamente apoyo al nuevo gobierno.
Sin embargo, se trata del paso previo dado por los abogados de Lugo para presentar casi inmediatamente el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos con los mismos argumentos.
En ese caso, un fallo favorable a Lugo incluiría una sanción política y económica contra el gobierno designado por el Congreso tras la destitución de Lugo y la demanda de su regreso a la silla presidencial.
El tratamiento del tema en la Corte Interamericana contará con el peso específico del aislamiento internacional en que se encuentra el Ejecutivo encabezado por Federico Franco, al cual reconocieron hasta ahora sólo tres gobiernos.
Ese aislamiento puede ampliarse ante la ofensiva que emprendió ahora contra Venezuela y otros Estados sudamericanos acusándolos de injerencia por la suspensión de su pertenencia a la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y al Mercado Común del Sur (Mercosur) a causa del golpe parlamentario ejecutado el 22 de junio pasado.
De su lado, la canciller colombiana, María Angela Holguín, negó. en entrevista con Radio Caracol. una reunión de su par de Venezuela, Nicolás Maduro, con militares paraguayos.
Holguín afirmó que en la reunión de cancilleres de la Unasur en Paraguay no vio a su par de Venezuela reunirse en privado con militares.
La canciller explicó que todos los miembros de la Unasur que asistieron a la reunión en la capital paraguaya estuvieron acompañados de ministros de Lugo y varios altos mandos militares, días antes de que el mandatario fuera destituido.
"En el sitio donde nosotros siempre estuvimos reunidos había gente de las fuerzas militares. Si usted me pregunta que si yo vi a Maduro reunirse con alguien, no. El estaba donde estábamos todos y fueron muchas horas y nadie estaba checando lo que hacía el vecino", declaró la funcionaria colombiana.
Holguín agregó que las imágenes que se conocieron de la supuesta reunión entre Maduro y los jefes militares de Paraguay, en donde ella también aparece, habrían sido captadas en un pasillo contiguo al despacho de la Presidencia.
El jueves pasado la ministra de Defensa de Paraguay, María Liz García, acusó al canciller venezolano de haber intentado sublevar a los militares de su país el viernes 22, poco antes de que el Congreso decidiera la destitución de Lugo.
García dijo que en aquella reunión, realizada en el palacio de gobierno, Maduro estuvo acompañado por el embajador ecuatoriano en Asunción, Julio Prado.
Por redacción