Esa razón fue la emisión de un reportaje en el que se acusaba a un político conservador de la era Thatcher de abusar de menores.
Se trata de Helen Boaden, directora de BBC News, y su adjunto, Steve Mitchell, máximos responsables de la emisión del reportaje.
El político al que se hacía referencia en el reportaje, emitido el pasado 2 de noviembre, era Lord McAlpine, tesorero de los tories en los años setenta y ahora residente en Italia, que negó de forma tajante las acusaciones. Aunque en el documental no se mencionaba su nombre, su identidad fue revelada por varios portales de Internet. El autor de las denuncias, Steve Messham, admitió de inmediato, al ver imágenes de McAlpine, que no era el hombre que le había violado una decena de veces cuando era adolescente, lo que forzó a la BBC a disculparse "sin reservas".
Tras la dimisión de Entwistle el sábado, el presidente del consejo que gobierna la cadena pública, el político conservador Chris Patten, ha admitido que la BBC se enfrenta a "un cambio minucioso, estructural y radical" tras este nuevo escándalo, que se produce cuando aún está vivo el caso Savile, uno de sus presentadores estrella, fallecido el año pasado y acusado ahora de haber abusado entre los años 60 y 80 de hasta dos centenares de mujeres cuando eran menores de edad. La cadena ha abierto una investigación para averiguar si en aquella época sus directivos hicieron la vista gorda ante estos hechos y, más recientemente, por qué se decidió no emitir un reportaje el pasado diciembre que ponía al descubierto esos abusos.
La investigación sobre el reportaje no emitido sobre el caso Savile la dirige Nick Pollard, el ex director de Sky News. Según señala la cadena en su web, a Boaden y Mitchell se les había pedido que abandonaran todas sus responsabilidades a la espera de los resultados de esta causa. Boaden tiene responsabilidad editorial y de gestión de las noticias tanto en Reino Unido en todo el mundo en la radio, la televisión y online.
Con información de agencias