En una agresiva revisión de los saldos de inversión foránea al cierre de 2009, la Secretaría de Economía y el Banco de México lograron revertir, al menos en el papel, una salida de 1,224 mdd registrada en el tercer trimestre del año pasado. Detrás de todo ello está la reclasificación de diversas operaciones, entre ellas los dividendos pagados por el banco español BBVA