La tasa de inflación de precios al consumidor en los 17 países que usan el euro cayó a un 2% en enero en la medición anual, según la Eurostat.
El desempleo se mantuvo en un récord del 11.7% durante diciembre, dijo Eurostat, una cifra ligeramente inferior al nivel de 11.9% esperado por los economistas.
La inflación está ahora cerca de la meta del Banco Central Europeo, de algo menos del 2%, y junto con el desempleo récord da al BCE espacio para recortar las tasas de interés nuevamente para estimular la economía.
Pero la mejora en la confianza comercial en la zona euro por tercer mes consecutivo en enero y una mayor producción de las fábricas sugieren que el bloque ha pasado lo peor de la recesión, lo que significa que un mayor estímulo por parte del BCE mediante costos de endeudamiento más bajos podría no ser necesario.
La tarea del BCE también se complica por una división entre los países ricos del norte de Europa, que están mostrando signos de estar saliendo de la crisis de deuda de la zona euro, y las naciones como España e Italia, que se encuentran en una profunda recesión.
"La historia de la zona euro sigue siendo una de divergencia entre la periferia y el núcleo", dijo Evelyn Herrmann, economista de BNP Paribas en Londres, quien también apunta a una brecha cada vez mayor entre las economías de Alemania y Francia.
Con información de Agencias.